El Tabernáculo

DIOS LE ORDENÓ A MOISÉS CONSTRUIR EL TABERNÁCULO

Mientras Moisés estuvo en la montaña, El señor le dio los mandamientos escritos en dos tablas de piedra.  El señor también le explicó a Moisés otras reglas y costumbres que Él les ordenaba seguir a los israelitas. 

Dios les dijo que construyeran un lugar especial donde El viviría con ellos. El pueblo aprendería cómo acercarse a su santo Dios sin ser destruidos.

 

Éxodo 25:1-8 

v.1 El SEÑOR habló con Moisés y le dijo: 
v.2  «Ordénales a los israelitas que me traigan una ofrenda. La deben presentar todos los que sientan deseos de traérmela. v.3  Como ofrenda se les aceptará lo siguiente: oro, plata, bronce, v.4  lana teñida de púrpura, carmesí y escarlata; lino fino, pelo de cabra, 
v.5  pieles de carnero teñidas de rojo, pieles de delfín, madera de acacia, v.6  aceite para las lámparas, especias para aromatizar el aceite de la unción y el incienso, 
v.7  y piedras de ónice y otras piedras preciosas para adornar el efod y el pectoral del sacerdote. v.8 Después me harán un santuario, para que yo habite entre ustedes.

Esto no significa que Dios ya no estaría en todo lugar.  Ya que, aunque viniera a vivir en el tabernáculo Dios seguiría estando en todas partes. Se construyó este lugar especial para que el hombre aprendiera cómo hay que acercarse a Dios.  

 

EL TABERNÁCULO TENÍA QUE CONSTRUIRSE EXACTAMENTE COMO DIOS LE ORDENÓ A MOISÉS

ÉXODO 25:9 

Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño del tabernáculo, y el diseño de todos sus utensilios, así lo haréis.

La palabra hebrea utilizada para tabernáculo significa tienda, morada u hogar. Todo en este lugar tenía que construirse exactamente como El Señor se lo dijo a Moisés cuando estuvo en la montaña. Todo tenía que hacerse a la manera de Dios. Como los israelitas estaban regresando a la tierra en que habían vivido sus antepasados, el tabernáculo tenía que ser liviano y portátil. Por lo tanto, el señor les dijo que construyeran gran parte del tabernáculo con materiales hechos de pieles de animales y pelo de cabra. Sus tiendas también se debían hacer con esos materiales.  

Dios le dijo a Moisés que el tabernáculo debía tener dos habitaciones.

EL LUGAR SANTO:

La La primera habitación, a la que se entraba desde el exterior, se llamaba el lugar santo o el lugar separado. Los sacerdotes escogidos por Dios eran los únicos que la usaban cuando estaban sirviendo a Dios.

EL LUGAR SANTÍSIMO:

La La segunda habitación, la habitación interior, era todavía más importante. Se llamaba el lugar santísimo, es decir la habitación más reservada de la casa de Dios. Esta habitación estaba apartada para Dios, excepto una vez al año, cuando se le permitía entrar al sumo sacerdote. La presencia de Dios estaría en esta habitación interior, el lugar santísimo. El arca y el propiciatorio

 

Éxodo 25:10-11

v.10 Haz un arca de madera de acacia, de un metro con diez centímetros de largo, setenta centímetros de ancho y setenta centímetros de alto. v.11 Recúbrela de oro puro por dentro y por fuera, y ponle en su derredor una moldura de oro. 

 

El Señor también le dio instrucciones a Moisés para hacer un cofre que iba a colocarse en la segunda habitación, el lugar santísimo era el lugar donde Dios iba a morar. El señor le dijo a Moisés que este cofre, llamado el arca del pacto, tenía que hacerse con la madera de un árbol especial que Dios eligió, y cubrirlo de oro.

 

EL ARCA Y EL PROPICIATORIO:

 

Éxodo 25:17

Haz un propiciatorio de oro puro, de un metro con diez centímetros de largo por setenta centímetros de ancho.

Dios le dijo a Moisés que hiciera una tapa de oro puro y la colocara sobre el arca en la habitación interior. La tapa se llamaría el propiciatorio. 

EL PROPICIATORIO:

El propiciatorio era el lugar más importante de todo el tabernáculo. Era el lugar donde Dios prometía vivir con los israelitas pecadores y mostrarles Su misericordia.

Éxodo 25:18

…y también dos querubines de oro labrado a martillo, para los dos extremos del propiciatorio. 

     El Señor le dijo a Moisés que tenía que hacer dos querubines de oro a cada extremo del propiciatorio.

 

CONSIDEREMOS:  

Cuando Adán y Eva pecaron en el Edén, Dios puso a la entrada del huerto a dos querubines para garantizar que Adán y Eva no regresaran y comieran del fruto del árbol de la vida, si ellos hubieran intentado ingresar de nuevo, los querubines de Dios los habrían matado con la espada de fuego. Ahora, estos querubines que Moisés tenía que hacer eran de oro y representaban que estaban custodiando el propiciatorio, pero al igual que en el huerto, si alguien indigno ingresaba allí, moriría   instantáneamente. 

Éxodo.25:19-20
v.19  En cada uno de los extremos irá un querubín. Hazlos de modo que formen una sola pieza con el propiciatorio. 
v.20  Los querubines deberán tener las alas extendidas por encima del propiciatorio, y cubrirlo con ellas. Quedarán el uno frente al otro, mirando hacia el propiciatorio. 

 

Los querubines tenían que colocarse enfrentados a cada lado del propiciatorio. Sus alas tenían que hacerse da tal forma que se desplegaran hacía el otro querubín sobre la tapa, que se llama el propiciatorio. Sus rostros tenían que mirar hacia abajo, hacia la tapa del propiciatorio.

 

Éxodo 25: 21-22

v.21  Coloca el propiciatorio encima del arca, y pon dentro de ella la ley que voy a entregarte. v.22  Yo me reuniré allí contigo en medio de los dos querubines que están sobre el arca del pacto. Desde la parte superior del propiciatorio te daré todas las instrucciones que habrás de comunicarles a los israelitas. 

El arca debería colocarse en la habitación interior justo detrás de la cortina. El señor le dijo a Moisés que colocara las dos tablas de piedra (dela ley)  dentro del arca del pacto, bajo el propiciatorio. Dios prometió que, cuando todo estuviera dentro de la habitación interior. Su presencia se haría evidente por una luz brillante, la gloria Shekiná. 

EL VELO:

Éxodo 26:31-33

v.31  Haz una cortina de púrpura, carmesí, escarlata y lino fino, con querubines artísticamente bordados en ella. 
v.32 Cuélgala con ganchos de oro en cuatro postes de madera de acacia recubiertos de oro, los cuales levantarás sobre cuatro bases de plata. v.33 Cuelga de los ganchos la cortina, la cual separará el Lugar Santo del Lugar Santísimo, y coloca el arca del pacto detrás de la cortina. 

Dios le dijo a Moisés que tenía que colocar una cortina gruesa y hermosa, como división entre las dos habitaciones. El propósito de esta cortina era recordarles a los israelitas, que ellos estaban separados de Dios a causa del pecado. 

LA CUBIERTA DEL TABERNÁCULO Y EL ALTAR DE BRONCE: 

 

Dios también le dijo a Moisés que hiciera un cerco de cortinas de tela colgadas verticalmente entre estacas y que las colgara alrededor de la estructura de dos ambientes. El tabernáculo de dos ambientes estaba cubierto de pieles teñidas de animales y una cubierta final de cuero de animales para formar el techo de la tienda.

Éxodo 27:1-2

v.1 Haz un altar de madera de acacia, cuadrado, de dos metros con treinta centímetros por lado, y de un metro con treinta centímetros de alto. v.2 Ponle un cuerno en cada una de sus cuatro esquinas, de manera que los cuernos y el altar formen una sola pieza, y recubre de bronce el altar. 

    Cuando una persona quería acercarse a Dios, el primer paso era traer una ofrenda quemada al Señor. Tenía que traerla al altar de bronce, justo detrás de la entrada. Tenía que colocar las manos sobre la cabeza del animal y luego matarlo. Al hacer esto, estaba reconociendo delante de Dios que era pecador y merecía morir. Al colocar las manos sobre el animal, se identificaba con el animal que iba a morir en su lugar. Pero estaba pidiendo a Dios que aceptara la muerte del animal en lugar de la suya.

Levíticos 1:1-5

v.1 El SEÑOR llamó a Moisés y le habló desde la Tienda de reunión. Le ordenó v.2  que les dijera a los israelitas: «Cuando alguno de ustedes traiga una ofrenda al SEÑOR, deberá presentar un animal de ganado vacuno u ovino. v.3  »Si el animal que ofrece en holocausto es de ganado vacuno, deberá presentar un macho sin defecto, a la entrada de la Tienda de reunión. Así será aceptable al SEÑOR. v.4  Pondrá su mano sobre la cabeza de la víctima, la cual le será aceptada en su lugar y le servirá de propiciación. v.5  Después degollará el novillo ante el SEÑOR, y los hijos de Aarón, los sacerdotes, tomarán la sangre y la derramarán alrededor del altar que está a la entrada de la Tienda de reunión. 

Dios permitía ovejas, cabras, toros y aves como sacrificios.

Los animales tenían que ser machos sin defectos, perfectos. La sangre de los animales tenía que ser derramarse.

Levíticos 17:11

Porque la vida de toda criatura está en la sangre. Yo mismo se la he dado a ustedes sobre el altar, para que hagan propiciación por ustedes mismos, ya que la propiciación se hace por medio de la sangre. 

 

Hebreos 9: 22. Dice… sin derramamiento de sangre no se hace remisión.

Pero ¿podía la sangre de los animales pagar por el pecado? ¡NO! La sangre de los animales sólo servía para recordar o ilustrar el castigo que exige el pecado. Dios no nos pide ahora que traigamos sacrificios de animales, pero eso fue lo que proveyó para los israelitas en ese tiempo. Ahora Dios nos ha provisto un camino mejor para redimir nuestros pecados.

 

AARÓN Y SUS HIJOS FUERON ORDENADOS SACERDOTES:

El Señor designó a Aarón para ser sumo sacerdote. Sus hijos también iban a ser sacerdotes.

 

Éxodo 28:1

Haz que comparezcan ante ti tu hermano Aarón y sus hijos Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar. De entre todos los israelitas, ellos me servirán como sacerdotes. 

    Solamente a Aarón, el sumo sacerdote, se le permitía entrar a la habitación interior el lugar Santísimo donde Dios estaba. 

Números 3:38

Moisés, Aarón y sus hijos acampaban delante del santuario, es decir, al este de la Tienda de reunión, por donde sale el sol, ya que tenían a su cargo el santuario en representación de los israelitas. Pero cualquiera que sin ser sacerdote, se acercaba al santuario, era condenado a muerte.

Sí otra persona traspasaba la cortina y entraba a la habitación interior moría. Sólo Aarón podía entrar en el lugar santísimo una vez al año el Día de la Expiación, que significa el “día de la purificación”

 

Levíticos 16:2-3  

v.2 Le dijo el SEÑOR a Moisés: «Dile a tu hermano Aarón que no entre a cualquier hora en la parte del santuario que está detrás de la cortina, es decir, delante del propiciatorio que está sobre el arca, no sea que muera cuando yo aparezca en la nube por encima del propiciatorio. Aarón deberá entrar en el santuario con un novillo para el sacrificio expiatorio y un carnero para el holocausto. 

 

Hebreos 9:7

Pero en la segunda parte entra únicamente el sumo sacerdote, y sólo una vez al año, provisto siempre de sangre que ofrece por sí mismo y por los pecados de ignorancia cometidos por el pueblo. 

Antes de entrar al lugar santísimo, Aarón tenía que matar un animal y poner la sangre en un recipiente. Luego, después de atravesar la cortina gruesa que separaba ambas habitaciones, Aarón tenía que rociar la sangre sobre el propiciatorio, es decir, la cubierta de oro puro del arca del pacto. Si todo se hacía tal cual el Señor se lo había dicho a Moisés, entonces Dios perdonaría los pecados que Israel había cometido el año anterior. 

Levíticos 16:34

Éste les será un estatuto perpetuo: Una vez al año se deberá hacer propiciación por todos los israelitas a causa de todos sus pecados. Y se hizo tal como el SEÑOR se lo había
mandado a Moisés.

 

Podía la sangre de los animales pagar los pecados. ¡NO! 

Hebreos 10:4

…ya que es imposible que la sangre de los toros y de los machos cabríos quite los pecados. 

El castigo por el pecado es la muerte y eso implica la separación del pecador para siempre de Dios. pero Dios si prometía aplazar el juicio que merecía y perdonar los pecados cometidos el año anterior si se acercaban a Él de la forma que les había dicho. Debían acercarse creyendo en Él, y trayendo sacrificio de sangre por sus pecados. Dios sólo aceptará a las personas que se le acercan de la manera que Él lo expresa en la Biblia.  

 

Éxodo 40:17

Fue así como el santuario se instaló el día primero del mes primero del año segundo. 

Si no hubieran hecho exactamente como Dios les había dicho, Él no habría venido a vivir con ellos. Pero debido a que Moisés y los israelitas hicieron todo de la manera que Él les había ordenado, Dios vino a vivir en el centro del campamento israelita en el lugar más santo del campamento.

 

Éxodo 40:34-35

v.34 En ese instante la nube cubrió la Tienda de reunión, y la gloria del SEÑOR llenó el santuario. v.35  Moisés no podía entrar en la tienda de reunión porque la nube se había posado en ella y la gloria del SEÑOR llenaba el santuario. 

 

Ahora los Israelitas podían acercarse a Dios de la manera que Él les había enseñado. En su misericordia, Dios estaba simplemente aplazando un año más el castigo que los israelitas merecían.

CONCLUSIÓN:

Nosotros, así como los israelitas somos pecadores. No podemos decidir cómo acercarnos a Dios. Él es perfecto y santo y sólo nos aceptará si nos acercamos a Él de la manera que nos dice en su Palabra.