PANORAMA:
La Casa o Templo de Dios aquí en la tierra también se llama la Iglesia o Asamblea del Señor Jesucristo. La Iglesia del Señor Jesús comenzó el día de Pentecostés, y desde aquel tiempo, todos los creyentes, los que hemos creído en Cristo como nuestro Salvador, ya somos miembros del Templo de Dios, o sea la Iglesia del Señor Jesucristo.
Los apóstoles y creyentes esperaron en
Jerusalén, ellos obedecieron al Señor Jesús regresando a Jerusalén y esperando a
que Él enviara al Espíritu Santo a vivir en ellos.
Hechos 1:12-14
Entonces volvieron a Jerusalén desde el monte que se llama del Olivar,
el cual está cerca de Jerusalén, camino de un día de reposo. 13Y entrados,
subieron al aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe,
Tomás, Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano
de Jacobo. 14Todos estos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las
mujeres, y con María la madre de Jesús, y con sus hermanos.
LA VENIDA DEL ESPÍRITU SANTO
Los apóstoles y todos los creyentes estaban en Jerusalén el día de Pentecostés, esperando la venida del Espíritu Santo tal como el Señor Jesús les había mandado.
Hechos 2:1-3
Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes
juntos. 2Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos.
TODOS LOS CREYENTES FUERON BAUTIZADOS CON EL ESPÍRITU SANTO
Tal
como lo había prometido, el Señor Jesús bautizó a todos Sus hijos con el
Espíritu Santo. Esto significa que lo envió desde el Cielo sobre todos los
creyentes que estaban reunidos y esperando en Jerusalén. El Espíritu Santo vino
a vivir permanentemente en todos los creyentes, unificándolos y uniéndolos al
Señor Jesús.
Recordemos
que, en la noche anterior a la crucifixión de Jesús, Él prometió a Sus
discípulos que, cuando estuviera de nuevo en el Cielo con Su Padre, le pediría
el Espíritu Santo, ese otro Ayudador, ¿y que lo enviaría a vivir en Sus hijos
para siempre.
Juan
14:16,17
16Y yo rogaré al Padre, y os
dará otro Consolador, para que esté con vosotros para siempre: 17el
Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir, porque no le ve, ni le
conoce; pero vosotros le conocéis, porque mora con vosotros, y estará en
vosotros.
FIESTA DE PENTECOSTÉS:
El
día de Pentecostés era una fiesta que los judíos celebraban. Esta fiesta o
banquete anual había sido ordenada por Dios, al igual que la celebración de la
Pascua. La fiesta de Pentecostés se efectuaba cincuenta días después de la
Pascua.
En
el día de Pentecostés, el Señor Jesús envió el Espíritu Santo desde el Cielo a
vivir permanentemente en los cuerpos de los creyentes para que se convirtieran
en el templo de Dios aquí en la tierra. Pero el Espíritu Santo no sólo habitó
en cada creyente individualmente, sino que también los unió para que así,
unidos, fueran llamados Templo de Dios.
Todos los creyentes hablaron idiomas diferentes al propio.
Hechos
2:4-6
4Y fueron
todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según
el Espíritu les daba que hablasen. 5Moraban entonces en Jerusalén judíos,
varones piadosos, de todas las naciones bajo el cielo. 6Y hecho este
estruendo, se juntó la multitud; y estaban confusos, porque cada uno les oía
hablar en su propia lengua.
LA
CASA O TEMPLO DE DIOS:
La Casa o Templo de Dios aquí en la tierra también se llama la Iglesia o Asamblea del Señor Jesucristo. La Iglesia del Señor Jesús comenzó el día de Pentecostés, y desde aquel tiempo, todos los creyentes, incluyéndoles a ustedes, han sido miembros del Templo de Dios, o sea la Iglesia del Señor Jesucristo.
CONSIDEREMOS:
¿Cuál fue la primera casa de Dios aquí en la tierra? El tabernáculo que mandó a Moisés que construyera. El lugar especial de habitación de Dios sobre la tierra fue el Lugar Santísimo en el tabernáculo. Después que los israelitas terminaron de construirlo, Dios mostró, por medio de una nube que lo cubrió todo, que Él había venido a hacer de éste Su lugar especial sobre la tierra.
LA IGLESIA DE DIOS:
El
día de Pentecostés, cuando Jesús envió al Espíritu Santo desde el Cielo, Dios
vino a vivir en todos Sus hijos por medio de Él. Éste fue el principio de la Iglesia
del Señor Jesucristo. Desde ese tiempo, el Espíritu Santo ha vivido en cada
persona que ha puesto su fe en el Señor Jesús como Salvador.
¿Dónde vive hoy el Espíritu Santo? Vive en cada uno de los hijos de Dios. En el momento en que usted confió en el Señor Jesús como su Salvador, el Espíritu Santo vino a vivir en su cuerpo. Ahora su cuerpo es el templo de Dios aquí en la tierra.
La Biblia dice en Hechos 2:4 que los 120 creyentes que estaban en el aposento alto en el día de Pentecostés, fueron todos llenos del Espíritu Santo.
Jesús
había dicho a los apóstoles que, cuando Él los bautizara con el Espíritu Santo,
se les daría la habilidad de testificar a todo el mundo acerca de Su vida,
muerte, sepultura y resurrección, y decir a las personas que Él estaba de nuevo
con Su Padre y tenía completa autoridad en el Cielo y en la tierra.
CONCLUSIÓN:
El Espíritu Santo dio a todos los creyentes en Jerusalén la habilidad de hablar en los diferentes idiomas de todos estos judíos que estaban de visita, para que oyeran de las cosas maravillosas que tan recientemente Dios había hecho a través del Señor Jesús. Cuando las personas escucharon y entendieron estas cosas maravillosas en sus propios idiomas,
quedaron atónitos. No podían entender cómo estos creyentes,
quienes eran todos de Galilea, podían hablar sus idiomas.