ESTUDIO BÍBLICO EN ORDEN CRONOLÓGICO

LECCIONES Y PODCASTS DISPONSIBLES

Dios se acordó de Noé y de todos los que estaban en el arca


DIOS JUZGÓ AL MUNDO ENTERO CON EL DILUVIO UNIVERSAL

Casi todas las culturas tienen una historia sobre el diluvio. Esto se debe, porque en realidad hubo un diluvio. Pero con excepción del relato del Génesis, estas historias están llenas de personajes mitológicos y, a veces, de detalles curiosos que se alejan del relato bíblico. Estas historias fueron pasando oralmente de generación en generación. Con ellas, la gente de estas sociedades impías tergiversó, extendió y minimizó la verdad. La influencia del pensamiento pagano, la adoración de falsos dioses y diosas, y el olvido humano de los detalles, se cambiaron para producir relatos que presentan sólo un fragmento de lo que realmente ocurrió.         

PANORAMA:

Esta lección abarca el periodo que se extiende desde Caín y Abel hasta Noé y el diluvio. Presenta la omnisciencia y la ira de Dios contra los pecadores, pero también Su gracia y paciencia al buscar que todos los hombres se arrepientan. La soberanía y la omnisciencia de Dios se demuestran en Su control sobre toda la creación. Es la instrucción que Dios le dio a Noé para construir el arca, vemos Su mensaje preciso con respecto a su único camino de salvación. 

La decadencia de los hombres en los días de Noé se compara con la decadencia de nuestra propia sociedad y con una advertencia contra la dureza de corazón.

La salvación de Noé y su familia por parte de Dios se presenta como un acto de gracia: La bondad de Dios para pecadores que no la merecen. El diluvio es un hecho histórico: un acto del poder soberano de Dios para juzgar a pecadores impenitentes.   

AUMENTO DE LA POBLACIÓN:

En la época de Noé, Sem, Cam, y Jafet, ya existía La explosión demográfica, es decir, un rápido incremento en de habitantes en un país o región.  Pero la gran mayoría estaba interesada en pasar lo que ellos consideraban una buena vida. Estaban obsesionados con el sexo y el casamiento. No estaban interesados  en cómo agradar a Dios.


DIOS EL ESPÍRITU SANTO ESTABA FRUSTRADO CON LA GENTE

 

Dios veía el pecado de esta gente lo cual lo entristecía, pero Él también los amaba y quería que se arrepintieran. Quería que cambiaran de opinión. Quería que admitieran que estaban equivocados. Quería que creyeran en Él.

Dios Espíritu Santo estaba continuamente diciéndoles que se arrepintieran, pero ellos se negaban. 

 

Ezequiel 18:32 Porque yo no quiero la muerte del que muere, dice el Señor Jehová, convertíos, pues, y viviréis. 

2ª. Pedro 3:9 
El Señor no tarda su promesa, como algunos la tienen por tardanza; sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos vengan al arrepentimiento. 

 

Génesis 6:3 Y dijo Jehová: No contenderá mi Espíritu con el hombre para siempre, porque ciertamente él es carne; más serán sus días ciento veinte años. 

 

Dios les advirtió que no iba a seguir siempre diciéndoles su mensaje. Si continuaban resistiéndolo, El dejaría que siguieran a Satanás y los castigaría. Dios les dijo que les iba a dar 120 años. Si no se arrepentían en 120 años, los castigaría. Dios el Espíritu Santo nos habla a nuestras mentes, procurando conseguir nuestra atención. Nos habla a través de la palabra de Dios y a través de otras personas.

La voz del Espíritu de Dios nos dice: “Escuchen el camino de Dios y confíen en Él”.

Pero como Satanás también habla a nuestras mentes, a veces parece que hay una guerra en nuestro interior.

Las voces de Satanás y sus demonios dicen: “No escuchen el mensaje de Dios”.

Si nos negamos a escuchar a Dios y creerle, la voz  del Espíritu Santo puede volverse más y más silenciosa. Él dejará que vivamos a nuestra manera. 

Cuando el corazón de una persona ya no escucha a Dios, la Biblia lo llama un corazón endurecido. 

 

Zacarías 7:11

Pero no quisieron escuchar, antes volvieron la espalda, y taparon sus oídos para no oír.

 

Esto es terriblemente doloroso para Dios, porque Él sabe que cuando una persona muere con el corazón endurecido, irá al castigo eterno y quedará separado de Él para siempre.

 

Dios dice en Ezequiel 33:11 no quiero la muerte del impío, sino que se vuelva el impío de su camino, y que viva. Volveos, volveos de vuestros malos caminos; ¿por qué moriréis? 

   

 

       AUMENTO DE LA MALDAD:

 

Génesis 6: 5 y 11

Al ver el SEÑOR que la maldad del ser humano en la tierra era muy grande, y que todos sus pensamientos tendían siempre hacia el mal …Dios vio que la tierra estaba corrompida y llena de violencia.

 

La mayoría de la gente seguía los caminos de Caín. Cada vez pecaban más, se negaban a creer el mensaje de Dios y confiar en Él y su misericordia. Estas personas nacieron pecadoras, porque eran descendientes de Adán. Además, amaban su pecado y se negaban a ponerse de acuerdo con Dios de manera deliberada.

 

CONSIDEREMOS: Las personas pecan, porque aman su pecado. Nadie puede culpar a otro. No podemos culpar a Adán, a Dios o a Satanás. Nosotros mismos elegimos pecar.

 

La gente de la época de Noé no tenía lugar para Dios en su mente ni corazón. Se negaban a reconocer a Dios, aunque aceptaban su existencia.  Las señales de Su obra estaban alrededor de ellos, en Su creación, pero no estaban agradecidos con Dios ni le creían. Dios también les hablaba a través de los hombres llamados profetas. Uno de los descendientes de Set, fue Enoc, quien era de los profetas de Dios. Ahora Dios les estaba hablando a través de Noé. 

 

2 Pedro 2:5 

y si no perdonó al mundo antiguo, sino que guardó a Noé, pregonero de justicia, con otras siete personas, trayendo el diluvio sobre el mundo de los impíos.

Los hombres no tenían excusa para su conducta. Simplemente se estaban rebelando contra Dios y se entregaban a sus malos deseos. 

 

Génesis 6:5

Y vio Jehová que la maldad de los hombres era mucha en la tierra, y que todo designio de los pensamientos del corazón de ellos era de continuo solamente el mal.

 

Fijaban sus mentes en cosas materiales, en sus cuerpos y en sus ambiciones por la autosuperación. 

Romanos.1: 18-32

 

Ciertamente, la ira de Dios viene revelándose desde el cielo contra toda impiedad e injusticia de los seres humanos, que con su maldad obstruyen la verdad. Me explico: lo que se puede conocer acerca de Dios es evidente para ellos, pues él mismo se lo ha revelado. Porque desde la creación del mundo las cualidades invisibles de Dios, es decir, su eterno poder y su naturaleza divina, se perciben claramente a través de lo que él creó, de modo que nadie tiene excusa. 

A pesar de haber conocido a Dios, no lo glorificaron como a Dios ni le dieron gracias, sino que se extraviaron en sus inútiles razonamientos, y se les oscureció su insensato corazón. Aunque afirmaban ser sabios, se volvieron necios y cambiaron la gloria del Dios inmortal por imágenes que eran réplicas del hombre mortal, de las aves, de los cuadrúpedos y de los reptiles. Por eso Dios los entregó a los malos deseos de sus corazones, que conducen a la impureza sexual, de modo que degradaron sus cuerpos los unos con los otros. Cambiaron la verdad de Dios por la mentira, adorando y sirviendo a los seres creados antes que, al Creador, quien es bendito por siempre. Amén. 

Por tanto, Dios los entregó a pasiones vergonzosas. En efecto, las mujeres cambiaron las relaciones naturales por las que van contra la naturaleza. Así mismo los hombres dejaron las relaciones naturales con la mujer y se encendieron en pasiones lujuriosas los unos con los otros. Hombres con hombres cometieron actos indecentes, y en sí mismos recibieron el castigo que merecía su perversión. Además, como estimaron que no valía la pena tomar en cuenta el conocimiento de Dios, él a su vez los entregó a la depravación mental, para que hicieran lo que no debían hacer. Se han llenado de toda clase de maldad, perversidad, avaricia y depravación. Están repletos de envidia, homicidios, disensiones, engaño y malicia. Son chismosos, calumniadores, enemigos de Dios, insolentes, soberbios y arrogantes; se ingenian maldades; se rebelan contra sus padres; son insensatos, desleales, insensibles, despiadados. Saben bien que, según el justo decreto de Dios, quienes practican tales cosas merecen la muerte; sin embargo, no sólo siguen practicándolas, sino que incluso aprueban a quienes las practican.

 

Las personas del tiempo de Noé eran orgullosos, egoístas y jactanciosos. Querían y envidiaban lo que tenían otras personas. Estaban celosos y odiaban a los demás. Discutían y peleaban todo el tiempo.

Eran crueles y algunos eran asesinos. Se burlaban, mentían y se engañaban unos a otros constantemente.

No tenían piedad de sus prácticas de Negocios. Siempre criticaban y decían cosas feas sobre otros a sus espaldas. No tenían límites en sus pasiones sexuales y hasta se comprometían en relaciones antinaturales.

 

DIOS DECIDIÓ DESTRUIR EL MUNDO:

 

Génesis 6:6-7

Y se arrepintió Jehová de haber hecho hombre en la tierra, y le dolió en su corazón. Y dijo Jehová: Raeré de sobre la faz de la tierra a los hombres que he creado, desde el hombre hasta la bestia, y hasta el reptil y las aves del cielo; pues me arrepiento de haberlos hecho. 

 

La gente era tan malvada que el Señor dijo que los destruiría a ellos y todas las cosas de la tierra que había hecho y  dado.

 

CONSIDEREMOS: 

¿Creen que Dios realmente destruiría a todo el que no se arrepintiera y confiara en Él? Sí, Dios hace lo que dice.

Dios le dijo a Adán y a Eva en el huerto: “Si desobedecen, morirán. Estarán separados de mi”. Ellos desobedecieron y murieron como Dios había dicho.

Dios fue claro con Caín y Abel al decirles que, si querían acercarse a Él y ser aceptados, tenían que traer un cordero y derramar su sangre.  Dios rechazó a Caín porque se acercó a Él a su manera. Ahora, en la época de Noé, Dios dijo que iba a destruir la tierra y toda la vida que había en ella, enviando un gran diluvio. ¿Cumple Dios su palabra? Sí. Dios siempre hace lo que dice, Él es inmutable. 

DIOS TUVO GRACIA PARA CON NOÉ:

Génesis 6:8-10

Pero Noé contaba con el favor del SEÑOR. Ésta es la historia de Noé. Noé era un hombre justo y honrado entre su gente. Siempre anduvo fielmente con Dios. Tuvo tres hijos: Sem, Cam y Jafet. 

 

Por la gracia y la misericordia de Dios, había un hombre con su familia a quien Dios no iba a destruir, Noé, nació pecador bajo el dominio de Satanás al igual que todos los descendientes de Adán. Noé no merecía la salvación de Dios, él también merecía el castigo eterno; pero Noé se acercó a Dios como Abel, Set, y Enoc, creyéndole y trayendo la sangre de los animales. 

 

Génesis 8:20

Y edificó Noé un altar a Jehová, y tomó de todo animal limpio y de toda ave limpia, y ofreció holocausto en el altar.

 

 

Noé escuchó las palabras que Dios tenía para él, creyó y se acercó a Dios de la manera que Él le dijo. Noé confió en la salvación de Dios ofrecida al hombre a través del Libertador venidero. Así que  Dios perdonó y aceptó a Noé. 



NOÉ OBEDECIÓ A DIOS:


Génesis 6:22

Y lo hizo así Noé; hizo conforme a todo lo que Dios le mandó.

Noé le creyó a Dios, él confió y dependió de Dios para salvarse junto con su familia, del diluvio que el Señor 
le había dicho que enviaría. Recordemos que no había llovido antes en el mundo hasta ese momento, el mundo se regaba a través de un vapor que subía de la tierra.

 

Génesis 2:5,6

Dios aún no había hecho llover sobre la tierra, ni había hombre para que labrase la tierra,  ..sino que subía de la tierra un vapor, el cual regaba toda la faz de la tierra.


Nadie jamás había visto llover, sin embargo, Noé creyó que Dios no podía mentir cuando decía que enviaría un diluvio. Noé le creyó a Dios, así que obedeció y construyó el arca tal como Dios le había dicho que debía hacerla.



CONSIDEREMOS: 

Como algunas personas no ven a Dios, el cielo o el lugar de castigo que Dios tiene preparado, no creen. Pero todo lo que la Biblia dice es verdad. Noé le creyó a Dios, aunque Noé nunca había visto llover. 

Noé creyó que Dios iba a destruir al mundo entero. También creyó que sólo Dios podía salvarlo a él y su familia, así que hizo lo que Dios le dijo. Dios no salvó a Noé por causa de su buena apariencia.  Dios lo salvó, porque Noé estuvo de acuerdo con Dios y confió en Él.



TODOS ENTRARON POR UNA PUERTA:


Génesis 7: 15-16


Vinieron, pues, con Noé al arca, de dos en dos de toda carne en que había espíritu de vida. Y los que vinieron, macho y hembra de toda carne vinieron, como le había mandado Dios; y Jehová le cerró la puerta.


Noé y su familia entraron en el arca por de la única puerta que Dios la había ordenado hacer a Noé, ésta era la única forma por la que alguien podía salvarse del diluvio y de la ira de Dios contra el pecado, los animales también entraron al arca.


DIOS CERRÓ LA PUERTA:


Génesis 7:16 b

…y Jehová le cerró la puerta.


Una vez que todos estuvieron adentro, Dios mismo cerró la puerta.


CONSIDEREMOS: 

Dios mismo encerró a Noé y también a su familia y a todos los animales dentro del lugar de resguardo, el arca, Dios no iba a dejar pasar más tiempo que el establecido para que las demás personas cambiaran de opinión y creyeran.


Cuando Dios cerró la puerta del arca fue demasiado tarde para los que no creyeron. Aunque lloraron o rogaran afuera de la puerta, ya no podían entrar. Noé no podía dejarlos entrar al arca, porque no dependía de él, Dios los había dejado afuera. No tenían forma de salvarse. Los que estaban dentro del arca estaban seguros porque Dios los había encerrado allí. Los que estaban fuera del arca ya no tenían forma de escapar de la ira de Dios, porque ellos habían decidido no creerle a Dios; cuando les dijo por medio de Noé, que la única forma de salvarse de morir en el diluvio, era entrando por la única puerta al arca. Cuando Dios dice que es tiempo de castigar
al mundo, ya no hay escapatoria.  

 


DIOS DESTRUYÓ A TODOS LOS QUE ESTABAN
FUERA DEL ARCA:


Génesis 7:17-23

Y fue el diluvio cuarenta días sobre la tierra; y las aguas crecieron, y alzaron el arca, y se elevó sobre la tierra. Y subieron las aguas y crecieron en gran manera sobre la tierra; y flotaba el arca sobre la superficie de las aguas. Y las aguas subieron mucho sobre la tierra; y todos los montes altos que había debajo de todos los cielos, fueron cubiertos. Quince codos más alto subieron las aguas, después que fueron cubiertos los montes. Y murió toda carne que se mueve sobre la tierra, así de aves como de ganado y de bestias, y de todo reptil que se arrastra sobre la tierra, y todo hombre. Todo lo que tenía aliento de espíritu de vida en sus narices, todo lo que había en la tierra, murió. Así fue destruido todo ser que vivía sobre la faz de la tierra, desde el hombre hasta la bestia, los reptiles, y las aves del cielo; y fueron raídos de la tierra, y quedó solamente Noé, y los que con él estaban en el arca. Y prevalecieron las aguas sobre la tierra ciento cincuenta días.


Después de cerrar la puerta del arca Dios envió la lluvia. Hubo tanta agua que cubrió el mundo entero, hasta las montañas más alta. ¿De dónde vino tanta agua? ¿Recuerdan cómo era el mundo cuando Dios lo hizo?

En el segundo día, Dios separó las aguas, y puso gran parte del agua arriba en el cielo; probablemente como un toldo de vapor que rodeaba la tierra. Ahora había llegado el momento de que Dios inundara la tierra, Él hizo que el agua que había colocado arriba en el cielo cayera a la tierra como lluvia. No fue cualquier lluvia común; ¡fue una gran inundación, el diluvio! Las aguas también salieron de lugares subterráneos. Tal vez Dios provocó grandes terremotos y erupciones volcánicas para abrir la corteza terrestre de modo que estas enormes fuentes de agua brotaran hacia la superficie de la tierra. 

 

Salmos 104: 6 y 8

Con el abismo, como con vestido, la cubriste; Sobre los montes estaban las aguas. Subieron los montes, descendieron los valles.

 

Dios hizo llover por cuarenta días y cuarenta noches hasta que toda la tierra se cubrió de agua, hasta las montañas y los árboles más altos. Dios destruyó a todos los que quedaron fuera del arca. Sólo Noé y su familia le creyeron a Dios y entraron por la única puerta disponible.

 

CONCLUSIÓN:

Dios es paciente con los hombres. En los días de Noé, él Señor esperó durante 120 años a que los hombres se arrepintieran de sus caminos malvados. Cada hombre, mujer y niño que estaban fuera del arca murieron en el diluvio. Dios es un Dios de amor, pero en verdad es 
un Dios justo y de ira contra el pecado.