DIOS
RECHAZÓ A CAÍN Y SU OFRENDA, PERO ACEPTÓ A ABEL Y SU OFRENDA.
La historia de Caín y Abel es un
clásico de todos los tiempos, pero en especial para el nuestro. En nuestra
sociedad muchas personas están escapando de Dios. Durante el proceso, ellos van
lastimando, mintiendo, robando y matando a sus semejantes.
La vida de Caín es un ejemplo de los
horribles resultados de la rebelión contra Dios. Caín se negó al llamado amoroso de
Dios al arrepentimiento, se apartó y mató a su hermano, pasó el resto de su
vida en la tierra y toda la eternidad lejos de la presencia de Dios.
Dios odia el pecado, el hombre es
responsable de sus elecciones; se le ha dado la opción de creer y obedecer a
Dios. El pecado no es culpa de Dios ni puede pagarse con los esfuerzos
terrenales del hombre.
PANORAMA:
Esta lección presenta el hecho que Dios
aceptó a Abel, quien se acercó al Señor por fe, de la forma en que Él lo
estableció, y el hecho que Dios rechazó a Caín, que trató de acercarse a su manera. La santidad de Dios
se muestra al exigir la pena de muerte por el pecado. La gracia y la
misericordia de Dios se muestra al proporcionar un camino para que los
pecadores vuelvan a Él y al razonar con el enojo de Caín.
Dios juzgó a Caín por matar a su hermano. Todos los descendientes de Caín tenían una mentalidad mundana. Dios continuó la línea del Libertador al levantar a Set en reemplazo de Abel.
DIOS LES DIJO LO QUE DEBÍAN HACER CUANDO VINIERAN A ADORARLO.
No había forma de que Adán y Eva o Caín
y Abel se acercaran a Dios.
Eran todos pecadores y Dios odia el pecado. Estaban separados de
Dios, y el castigo por el pecado es la muerte.
Romanos 6:23 Porque la paga
del pecado es muerte,
mientras que la dádiva de
Dios es vida eterna en Cristo
Jesús, nuestro Señor.
No podían darle nada a Dios para pagarle
por sus pecados. pero Dios preparó un camino para que ellos pudieran acercarse
a Él.
Génesis 3:15 Pondré
enemistad entre tú y la mujer, y entre tu simiente y la de ella; su simiente te aplastará la cabeza, pero tú le morderás el talón.
No era el camino a la manera del
hombre, fue Dios quien proveyó este camino. Nadie más podía establecer un
camino para ellos. Dios
hizo un camino para ellos porque los amaba.
Dios debe haberles dicho a Adán y Eva
lo que debían hacer
si querían acercarse a Él. Probablemente Adán y Eva también les dijeron a sus
hijos Caín y Abel, las instrucciones
que Dios les dio si deseaban acercarse
a Él. La
Biblia nos da buenas razones para creer que Dios les comunicó estas cosas
a Adán y Eva, y que Abel y Caín también las sabían. Aquí está lo que Dios
debe haberles dicho: Cuando
se acercaran a Él, tenían que traerle un cordero como ofrenda. Tenían que
matar el animal de forma tal, que la sangre del animal brotara a raudales. Pero si la sangre de
los animales no podía pagar su
pecado, ¿Por qué les diría Dios que
mataran un cordero?
Dios quería que recordaran que el castigo por el pecado es la muerte. Quería que recordaran que ellos morirían e irían al castigo eterno a menos que Él los salvara. Si ellos estaban de acuerdo con Dios en que eran pecadores, y que solo Él podía salvarlos del castigo eterno, entonces tenían que traer un cordero y matarlo como Dios les había dicho.
Es un hecho de que Dios es Santo y
justo, que exige la muerte como pago por el pecado. La Biblia expresa
claramente que se debe derramar sangre por el pecado.
Levíticos 17:11
Porque la vida de la carne en la sangre está, y yo os la he dado para hacer expiación sobre el altar por vuestras almas; y la misma sangre hará expiación de la persona.
Dios prometió que, si venían por fe,
ofreciéndoles la sangre de los animales, Él los aceptaría y perdonaría
sus pecados.
Hebreos 9:22
De hecho, la
ley exige que casi todo sea purificado con sangre, pues sin derramamiento de
sangre no hay perdón
CONSIDEREMOS:
El derramamiento de sangre por el
pecado fue parte del plan de la gracia de Dios de rescatar al hombre del pecado,
de Satanás y de la muerte. Dios no aceptó el cordero de Abel como pago por
su pecado. El pecador debe pagar el pecado quedando separado de Dios
para siempre.
Ezequiel 18:4 La persona que peque morirá. Sepan que todas
las vidas me pertenecen, tanto la del padre como la del hijo.
Dios perdonó el pecado de a Abel y lo aceptó, porque
Abel confió en Dios, y no en sí mismo. Creyó que Dios había prometido enviar al
Libertador.
Hebreos 11:4
Por la fe Abel
ofreció a Dios un sacrificio más aceptable que el de Caín, por
lo cual recibió testimonio de ser justo, pues Dios aceptó su ofrenda.
Y por la fe Abel, a pesar de
estar muerto, habla todavía.
CONSIDEREMOS:
Acercarse a Dios de una forma distinta
a la que Él ha establecido es vanidad y pecado. Dios rechazará al hombre
que trate de acercarse a Él a su manera.
DIOS RECHAZÓ LA
OFRENDA DE CAÍN
Génesis 4:5
pero no miró
con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y
decayó su semblante.
Como ofrenda, Caín trajo las cosas que él
había cultivado. Pero
Dios no quiso aceptar a Caín ni tampoco su ofrenda. ¿Por qué no la aceptó?
¿Fue porque las cosas que Caín cultivó y le trajo a Dios no eran buenas? ¿Fue por
qué a Dios no le gustaban los cultivos?
¿Dios rechazó la ofrenda de Caín porque Caín era más pecador que Abel? No, esa no fue la
razón para que Dios lo rechazara.
Caín y Abel, ambos nacieron pecadores.
Dios rechazó la ofrenda de Caín porque: Caín no se acercó a Dios admitiendo que era pecador. Se acercó a Dios a su manera, de acuerdo con sus propias ideas y no de la manera que Dios había ordenado. Caín no le creyó a Dios. No tuvo confianza en la forma en que Dios les había dicho que se acercaran a Él. Esa es la razón por la que Dios lo rechazó.
CONSIDEREMOS:
Muchas personas gastan buena parte de
su vida tratando de encontrar una forma de llegar a la fuente de vida
espiritual. Tal vez sus esfuerzos incluyan actividades que parecen muy piadosas
y religiosas: ir a la iglesia, dar dinero a la iglesia, hacer toda clase
de “buenas obras”, o cualquier otra cosa.
Isaías 59:2
Son las
iniquidades de ustedes las que los separan de su Dios. Son estos pecados los que lo llevan a ocultar su rostro para no escuchar.
Romanos 3:23
por cuanto
todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.
CONSIDEREMOS:
Dios no ha cambiado; sigue siendo
el mismo. Aunque ahora no nos ordena sacrificar corderos, aún
establece una única forma de acercarnos a Él. Nosotros también
debemos
acercarnos a su manera; de otro modo, nos rechazará como rechazó a
Caín.
EL JUICIO DE DIOS
SOBRE CAÍN
Génesis 4:9
Y Jehová dijo
a Caín: ¿Dónde está Abel tu hermano? Y él respondió: No sé. ¿Acaso soy yo
guarda de mi hermano?
Aunque Dios hizo esta pregunta, Él ya
sabía que Caín había matado a Abel.
Dios lo ve todo, Dios está en todas partes (omnipresente)
y sabe todas las cosas (omnisciente).
Proverbios 15:3
Los ojos de
Jehová están en todo lugar, mirando a los malos y a los
buenos.
Génesis 4:10-15
Dios es el vengador de todo pecado. Todo pecado en contra
de otra persona también es pecado contra Dios. Él es el creador de
todas las personas; de modo que Él castiga a cualquiera que le dice o hace
algo hiriente a otra persona.
CONSIDEREMOS:
Todas las personas pertenecemos a
Dios por derecho, porque Él nos creó, y solo Él tiene potestad sobre
nuestras vidas, sólo Él tiene derecho a disponer de nuestras vidas, y cuando moriremos.
Ezequiel 18: 4a
He aquí que
todas las almas son mías; como el alma del padre, así el alma del hijo es
mía.
Esto no significa que Dios vengará toda
la maldad inmediatamente, pero hay que pagarle a Dios por todo pecado. Sin embargo, Caín no estaba dispuesto a escuchar
a Dios, se alejó de Dios siguiendo los caminos
de Satanás. Caín no quería arrepentirse; se negó a
cambiar de actitud hacia Dios y hacia su pecado.
CONSIDEREMOS:
¿Qué es el Arrepentimiento?
El arrepentimiento es un cambio de
mente, un cambio de actitud hacia Dios, hacia uno mismo y hacia el propio
pecado. Arrepentido, es el pecador que reconoce ante Dios: “Dios tú tienes
razón estoy equivocado. Todo lo que ordenaste es bueno, justo y santo. He
fallado. No tengo esperanza en mí mismo”.
DIOS DIO A SET EN
REEMPLAZO DE ABEL.
Génesis 4:25
Y conoció de
nuevo Adán a su esposa, la cual dio a luz un hijo, y llamó su nombre Set:
Porque Dios (dijo ella) me ha sustituido otro hijo en lugar de Abel,
a quien mató Caín.
Dios le dio otro hijo a Adán y Eva en
remplazo de Abel, quien había muerto en manos de Caín. En el huerto, Dios había prometido enviar un libertador
que vencería a Satanás. Tendría que haber venido por la línea
de Abel, quien había confiado en Dios.
Satanás trataba de obstaculizar el plan
de Dios de enviar un Libertador, y por todos los medios y dirigió
a Caín para matar a Abel.
Dios planeó que el Libertador viniera al mundo por la
línea de Set, quien también nació pecador separado de Dios, pero confió en
Dios, así como su hermano Abel. Ahora el Libertador vendría
al mundo a través de la línea de Set.
CONCLUSIÓN:
¿Fue este el fin del plan y de la promesa
de Dios de enviar un libertador? ¡NO! Dios siempre hace lo que promete. No
abandona las promesas ni cambia de parecer (es Inmutable). En remplazo de
Abel, Dios les dio a Adán y Eva otro hijo, Set.